sábado, 4 de junio de 2011

CUÁL ES LA CAUSA DE SU DOLOR DENTAL?

Sus síntomas podrían ayudar a determinarla

La cavidad oral o bucodental comprende una variada morfología y muy diversas estructuras y tejidos que guardan estrecha relación entre sí, y que conforman lo que se ha denominado el complejo estomatognático. Cuando alguna de estas estructuras se ve afectada en su integridad por daño o enfermedad subyacente, suelen experimentarse cambios que pueden ir desde una simple molestia hasta un dolor insoportable, y la consiguiente necesidad de acudir a la consulta odontológica. Este tipo de manifestaciones subjetivas son conocidas como síntomas, que es la información que le permite al odontólogo formarse una impresión clínica como base principal de un diagnóstico definitivo de cada caso.


El dolor dental es la causa más frecuente que motiva la consulta de urgencias, por su condición de experiencia sensitiva y emocional desagradable y, dependiendo de su localización y factor desencadenante, en la gran mayoría de los casos es posible determinar que tipo de daño o enfermedad ocurre. Así, por ejemplo; si hay una manifestación de dolor al tomar líquidos fríos que no cesa fácilmente, podría tratarse de un daño o agresión a la pulpa dental (que es el complejo de tejidos internos del diente donde se alojan nervios, vasos sanguíneos, linfáticos, etc.); si es una queja de dolor a la masticación en determinado diente o muela la enfermedad podría ser periodontal, que es aquella referida a los tejidos o estructuras de soporte del diente. Si se trata de un dolor espontáneo y permanente, de reciente aparición y con aparente sensación de “latidos” podría ser un proceso infeccioso periapical, que es aquel localizado alrededor del ápice de las raíces dentales.

En cualquier caso, una buena historia clínica siempre debe estar precedida de una adecuada anamnesis o recordación de los datos más importantes acerca de un determinado padecimiento. Un buen ejemplo de ello podría ser el siguiente orden de preguntas:

1. ¿Cuando comenzó el dolor?
Si el dolor comenzó:
• Hace 1 o 2 días: Es un proceso Agudo.

• Hace 4 a 8 semanas o más: Es un proceso Crónico que puede estar en proceso de tornarse agudo (Lo normal es que un proceso agudo se convierta en crónico, pero puede ocurrir que después de estar algún tiempo en fase crónica regrese a la fase aguda).

2. ¿El dolor es continuo o intermitente?
• Si el dolor es continuo y constante: se puede pensar en una enfermedad de la pulpa dental (Que es el complejo de tejidos internos del diente donde se alojan nervios, vasos sanguíneos, linfáticos, etc.), tal como una Pulpitis Irreversible Aguda.
• Si el dolor es Intermitente: la pulpa esta en proceso de degeneración.

3. ¿El dolor es suave, moderado o intenso?
• Dependiendo del dolor que experimente podrá saberse que tan aguda o crónica es la enfermedad o si es de origen pulpar o periodontal (Es bueno recordar que las enfermedades de origen periodontal presentan dolores suaves a moderados y que las patologías de origen pulpar presentan dolores agudos en la mayoría de los casos.

4. ¿Le duele al acostarse o al inclinarse?
•Las patologías pulpares en proceso de necrosis producen dolores que aumentan al acostarse.

5. ¿El dolor es en forma de pinchazos o pulsátil?
• Este tipo de dolor es característico de una patología periapical en proceso de agudización.

6. Puede señalar con UN dedo el diente que le duele?
• Si usted puede señalar con UN solo dedo el diente, podría determinarse con exactitud el diente afectado, pero si usted no puede apuntar a un solo diente sino a diferentes zonas, usted se encuentra frente a un dolor difuso que requiere de más pruebas para poder determinar el origen del dolor.

7. ¿El dolor es producido por un estimulo o es espontáneo?
• Existen factores que inducen, intensifican o modifican el dolor que siente (calor, frío, dulce, acido, oclusión, cepillado, cambios de postura entre otros).

8. ¿El calor, el frío, el dulce o el morder le causan dolor?
Si la respuesta es positiva a:
• Calor: Se asocia con patología pulpar.
• Frió: Se asocia con patología pulpar.
• Dulce: Se asocia con filtración por restauración desadaptada o exposición de dentina (como ocurre en los casos en los cuales los cuellos de los dientes y muelas – especialmente premolares y molares – están expuestos por retracción de las encías y por desgaste, producido, especialmente, por abrasión mecánica a causa de un cepillado incorrecto).
• Morder: -Se asocia con Inflamación del tejido de soporte o ligamento periodontal, fractura vertical o de una cúspide, lesión periapical (alrededor del ápice de la raíz).

9. ¿El dolor causado por diferentes estímulos, desaparece rápidamente o continúa?
• Si el dolor desaparece rápidamente después de retirado el estimulo: la patología podría ser pulpar reversible.
• Si el dolor perdura después de retirar el estimulo: la patología podría ser pulpar e irreversible.
• Si el dolor es causado al morder o al realizar las pruebas de percusión y de palpación sobre el, o los dientes: la patología es periapical. Hay que descartar fractura vertical del diente o restauraciones desadaptadas.

10. ¿Hay algo que le alivie el dolor?

Si el dolor cede después de:

- Tomar analgésico: La patología pulpar o periapical está establecida.
- Si siente alivio con Frío: Está sufriendo una pulpitis irreversible aguda.
- Si el dolor desaparece sin necesidad de aplicar ningún agente de los mencionados anteriormente puede tratarse de una pulpitis reversible.

Es importante describir todas las sensaciones que se experimenten, pues eso ayudaría al odontólogo a establecer con mayor grado de certeza un buen diagnóstico y permitiría, en consecuencia, realizar un adecuado plan de tratamiento.

SALUD BUCAL Y TABACO: ENEMIGOS A MUERTE

"Es una obligación de nosotros los dentistas preocuparnos de este tema si queremos tener una práctica clínica más segura". Así lo señala el odontólogo periodoncista chileno Claudio Melej, quién considera fundamental influir sobre sus pacientes para ayudarlos a dejar el peligroso vicio del cigarro. "La suspensión del hábito tabáquico no sólo mejora la práctica médica odontológica, sino que la hace más rentable y la aprestigia, por que el paciente que logra dejar el cigarrillo yendo al dentista, se convierte en un paciente que recomienda esto a otras personas. Uno se posiciona ante la gente con un enfoque profesional distinto, más integral", recalca.

La mayoría de los dentistas no hablan con sus pacientes sobre su hábito de fumar por temor a importunarlos y a que éstos dejen de visitarlos. Según Melej, lo que ocurriría es todo lo contrario. "Se produce una empatía muy agradable, el paciente se siente más querido, que hay más preocupación por su salud".

Numerosos estudios realizados en todo el mundo han demostrado que el hábito de fumar contribuye directamente en el desarrollo de enfermedades periodontales (de la encía) y que éstas serían de una mayor gravedad comparado con personas no fumadoras. Además se ha determinado que el cigarrillo altera la respuesta inmune contra las infecciones, disminuye la capacidad de reparar los tejidos de la boca y retarda la cicatrización de heridas, por lo que el dentista puede incluso contraindicar un determinado tratamiento, como los implantes de titanio, por ejemplo, donde se ha comprobado, luego de 5 años de observación post operatoria, que los fumadores tienen 2 veces más riesgo de perder sus dientes respecto a pacientes no fumadores.

Según Claudio Melej, el riesgo de un fracaso en la colocación de implantes en pacientes fumadores aumenta en un 35%. "No es que 35 de 100 vayan a fallar, sino que aumenta el riesgo de un mal tratamiento en este tipo de individuos", explica, y además agrega: "Hoy en día puede hasta ser peligroso desde el punto de vista legal si uno no conversa previamente con el paciente sobre sus posibilidades. La gente debe saber de los riesgos y complicaciones que implica la práctica que se le va a realizar; uno le puede decir al paciente: porque estas fumando se te están cayendo los dientes".

Por esto es muy importante concientizar a las personas de esta situación, pero no con campañas del terror, eso no funciona según Melej, "o sino la gente ya habría dejado el hábito con sólo leer la advertencia de los paquetes de cigarrillos por temor a adquirir cáncer". Lo que hay que hacer según el profesional, es mostrarle a la gente todo lo que ganará al dejar el tabaco de lado, "apuntar siempre a factores positivos".

Entonces… ¿Por qué dejar de fumar? Simple. Le ayudará a reducir las posibilidades de producir cáncer de boca y labio, su dentadura volverá a brillar y evitará además la perdida de ésta, reducirá el riesgo de enfermedad periodontal, mejorarán sus sentidos del gusto y olfato, mejorará el resultado de sus tratamientos dentales y dejará de sufrir la desagradable halitosis, por nombrar sólo algunos resultados positivos.

Finalmente, el doctor Melej señala que el rol de los dentistas, apenas llega un paciente a sus consultas, es saber si fuma o no, y más allá de eso, saber cuánto y desde cuando, si ha intentado dejar de hacerlo y por qué ha fallado, si ha usado terapias sustitutivas y si no, si estaría dispuesto a hacerlo de forma responsable y supervisada. "Es vital informar y cuestionar objetivamente el inicio de cualquier tratamiento en pacientes fumadores, sobretodo en el caso de los implantes. Tener un fracaso en esto es muy complejo, ya sea por los tiempos, expectativas y los costos involucrados", concluye el facultativo.

CONCEPTO

Una combinación de conocimientos, arte, experiencia, imaginación e ilusión profesionales producen resultados visibles de armonía, equilibrio y funcionalidad que se reflejan en bienestar y confianza de nuestros clientes.

VALE LA PENA SONREIR

VALE LA PENA SONREIR
UNA BELLA SONRISA ES SU MEJOR TARJETA DE PRESENTACION